Esta es una nota colectiva que reúne perspectivas diversas del Force Fest 2018, evento que se llevó a cabo el 6 y 7 de Octubre en el Club de Golf Teotihuacán.
Describir la experiencia del Force Fest es bastante extraño. Se puede empezar desde un punto de vista muy bueno, hasta el más negativo que se pueda pensar, así que habrá que hacer una lista que compare los aspectos positivos con los negativos.
Lo bueno:
- System Of A Down la rompió sabroso.
- Stone Temple Pilots y Bush superaron expectativas en el festival.
- La banda nunca se agüitó a pesar de la lluvia.
- La comida de los food trucks era buena.
- NOFX mentando madres a Alice In Chains por tocar a la misma hora que ellos.
- La chela no sabía nada mal.
Lo malo:
- El recinto.
- El estacionamiento.
- El lodo.
- La producción del asco.
- La cancelación de las bandas, incluyendo headliners como Lamb Of God y Rob Zombie
- El fallo del cashless.
- La pésima actitud de los organizadores al negar un mínimo reembolso a pesar del fiasco.
- Cubrir el hecho de que las bandas cancelaron por fallas contractuales echándole la culpa al “clima”.
En experiencia propia, el desmadre y escuchar a System Of A Down salvó al festival al menos durante el día sábado, pero desde que se llegaba al recinto se notaba la falta de organización. Una fila de aproximadamente una hora para ingresar a un estacionamiento cuya entrada estorbaba en la carretera no es muy buena idea, y peor aún el hecho de que los coches se quedaban estancados debido al lodo y la lluvia.
No es la primera vez que el lodo hace de las suyas en un festival; generalmente no hay mucha queja de ello ya que la gente se adapta. El problema aquí es que el 70% del recinto es tierra y, aparentemente, en la Ciudad de México y el Estado de México ha estado lloviendo, así que gran parte del recinto estaba enlodado. Se podría decir que no hubo medidas de prevención para este caso, pero no se sabe con certeza. De todo corazón esperamos que hayan existido aunque esto signifique un error más en la logística.
A muchos los agarró de bajada la aparición del sistema cashless dentro del festival, ya que no se le dio difusión suficiente durante el evento y esto se reflejaba en filas enormes para obtener una tarjeta o una pulsera. A estos problemas se le suma el hecho de que la cerveza podía ser pagada en efectivo, pero la comida forzosamente era pagada con cashless, cuando se veía aclarado en sus FAQ´s que el pago en general era con el chip de la pulsera. Al final, el sistema cashless falló, lo cual probablemente provocó que a más de uno lo dejara sin efectivo por el resto del festival.
Para acabarla de fregar, el descaro de los productores al no sacar nuevos horarios para cubrir las bandas que ya habían cancelado el día domingo fue enorme. A la gente no se le puede engañar: con la cancelación de Lamb Of God desde la página oficial de la banda, se veía venir que existieran más problemas de esta índole, más aun con rumores de la cancelación de Rob Zombie el mismo sábado. La gente paga por ver ciertas bandas y la cancelación de no sólo dos, sino cuatro headliners el día domingo (sumándose a la lista Exodus y Testament), hace que la gente pida explicaciones y reembolsos ante un festival que no cumplió con las expectativas en cuanto a calidad. Las justificaciones que dieron los productores acerca de las cancelaciones fueron acotadas al clima, aún después de que Lamb Of God y Rob Zombie dijeran claramente que fueron causa de fallas en la logística, al menos en estos dos casos.
Hasta aquí la cobertura de Ricardo Cárdenas
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Realmente fue triste el ver cada detalle que hacía que el evento se hundiera más y más en el mismo lodo por el que caminábamos. Desde el hecho de que se agotaron las pulseras que se canjearían por los boletos comprados -existiendo casos de personas con hasta 2 brazaletes de secciones distintas- hasta ver cómo Slayer hizo su berrinche para tocar primero sin dejar oportunidad a Danzig de dar su espectáculo. Esa fue la cereza del pastel al ver con ello más errores de organización y logística, aunque eso no significó que las presentaciones de los headliners que aún quedaban, y que tanto se esperaban, no fueran buenas o de calidad. Otro punto a tomar en cuenta es el hecho de intentar implementar sistemas como el cashless que no creo que hayan probado antes, por lo que se hizo notar su falta de experiencia y, siendo muy honesta, aún no somos una sociedad que opere completamente sin efectivo. De igual forma, fue tonto pensar que el evento era patrocinado por Telcel y que no hubiera cobertura de esa compañía telefónica en el lugar. Lo único que lograron fue que colapsara la idea de hacer un Wacken Open Air en México, decepcionando cada vez más a los asistentes del Force Fest y dejando ahora la vara alta para el próximo Knot Fest.
Los servicios dentro del lugar fueron costosos. Me impresionó un poco el saber que hasta los juegos mecánicos cobraran cuando en otros festivales el uso de ellos ya viene incluido en el boleto. Las personas disfrazadas y que tenían un atuendo bastante interesante a la vista también colocaron un precio -o pedían una cooperación voluntaria- para poder sacarse la foto. En esto último, quiero pensar que es una forma de redituar su propia inversión en el vestuario y que la gente reconozca ese esfuerzo.
Al final, siempre es bueno ver las cosas con un poco de humor por el simple hecho de que ya estábamos dentro y, con ello, ya éramos parte de la masacre. Lo cierto es que no todos tuvimos la misma experiencia dentro del festival y fue lamentable enterarme de historias donde muchos de los asistentes sufrieron percances y negligencia por parte del personal y organizadores del festival, al no entregar lo que prometieron -por lo que ya muchos saben-. Por lo mismo, estoy segura de que muy pocos pudieron disfrutar del evento como se debía.
En mi caso, tuve la oportunidad de ver a System Of A Down que es una banda icónica de mi adolescencia y que me trae buenos recuerdos, por lo que al verlos me sentí muy contenta y empapada de cierta nostalgia, ya que no pude ser parte de sus conciertos anteriores en la CDMX. Es cierto que, aunque fueron dos horas llenas de sus canciones más representativas, SOAD tuvo poca interacción con su público y no posee un gran espectáculo a mostrar.
Es por ello que cabe destacar los descubrimientos musicales que tuve durante el Force Fest, porque es inevitable ponerme en el lado de las bandas, nacionales o internacionales, que han trabajado duro para encontrar a un público que escuche sus propuestas. Pese a los desfases, atrasos y cambios de horario de último minuto, hubo espectáculos dignos de resaltar en los diversos escenarios durante ambos días y, en especial, en el Sound & Noise Stage. Les contaré más de ello en una próxima entrega para que estén al pendiente porque, sin duda, también los querrán escuchar.
Hasta aquí la cobertura de Karen Perea
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Después de todo lo acontecido y la indiscutible inconformidad por parte de los asistentes, nos encontramos ante lo que fue, probablemente, el evento con la peor organización y los más desastrosos contratiempos de este año.
Resulta ilógico que se presenten este tipo de inconvenientes en un Force Fest que aparentaba querer colocarse entre los grandes. Pero la cancelación de presentaciones por incumplimiento de contrato por parte de bandas que encabezaban el festival; la lluvia ocasionando problemas de audio y conexión; el lodo que dejó estancados en el estacionamiento a una gran cantidad de autos; y, el pésimo servicio de pago y transporte oficial, hicieron del evento, sarcásticamente, algo bastante memorable. Y cómo no.
Al principio los organizadores parecían estar más al pendiente de mantener su reputación a salvo, que de dar respuesta a los miles de asistentes que demostraron su descontento a través de las redes sociales, justo donde aparecieron diversas acusaciones hechas con anterioridad contra el propietario de una de las empresas encargadas de la organización del evento.
¡Los trapitos al sol!
Y sin embargo, el 12 de Octubre por la noche, salieron las buenas noticias. La fanpage oficial del Force Fest en Facebook, realizó una publicación donde Live Talent daba un comunicado a través del sitio web que a muchos dejaba tranquilos, pues en él se disculparon por todos los percances que afectaron negativamente al festival y también hacían referencia a reembolsos del sistema cashless. El comunicado también mencionaba que se enmendaría la ausencia de los headliners, prometiendo un nuevo evento en el cual, con los mismos boletos del Force Fest, se podría acceder y disfrutar de lo que a muchos privaron el Domingo 7 de Octubre. Aquí te dejamos los links de la publicación en Facebook y del comunicado en sí para que revises a fondo la información y resuelvas las dudas que te puedan surgir. Lo importante es que siga el rock. https://www.facebook.com/forcemetalfest/videos/1789745461154213/?comment_id=1789850667810359 https://forcemetalfest.com/comunicado-de-live-talent-respecto-a-force-fest-2018/
Hasta aquí la cobertura de Hugo Herrera
--- Fotos: Karen Perea
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